Las cámaras patronales, en las cuales se organiza el empresariado local, se encuentran metidas de lleno en la campaña electoral, ya sea de forma abierta o solapada, dando impulso a los candidatos que mejor defenderán sus intereses y negociados.
Las entidades patronales están de campaña. La Exposición Rural fue una demostración de esto. Por las tribunas y los brindis de la feria desfilaron los principales dirigentes de los espacios que buscarán en octubre disputarle el gobierno al kirchnerismo: Duhalde, Alfonsín, De Narváez, Carrió, Macri, Rodríguez Saá… “Estoy seguro que pronto, todos juntos en las urnas, podremos devolver a la patria los valores que fuimos olvidando. Refundemos una república con instituciones respetables y respetadas (…) Esta larga noche está llegando a su fin”, aseguró Biolcati desde el palco despertando los aplausos de su público.
También hubo, en el marco de la Rural, encuentros entre los referentes de las distintas cámaras empresarias. Al denominado “Grupo de los Seis” (UIA, SRA, Adeba, Bolsa de Comercio, Cámara de la Construcción, Cámara de Comercio), se agregaron representantes de IDEA y AEA, para compartir un almuerzo y debatir sobre el panorama político y el provenir de sus negocios.
Claramente, no existe, hoy por hoy, una posición unificada entre ellos sobre quien es el mejor candidato para conducir las riendas del gobierno. Mientras las patronales del campo se ubican en las filas de la oposición al kirchnerismo (incluso muchos de ellos forman parte de las listas, como el caso de Llambías, candidato a diputado por las listas de Carrió), otros como De Mendiguren y Brito (de la UIA y la Banca, respectivamente) apoyan al gobierno. Sí lograron, en cambio, acordar ciertos puntos para trabajar en común como ir con una posición unificada al próximo Consejo del Salario Mínimo con un claro objetivo: mantener el salario lo más bajo posible. “Todos coincidimos en que vamos a ir pero no estamos de acuerdo en una suba tan pronunciada”, comentó el presidente de la UIA a la salida del encuentro en referencia a los $2.600 que pedirá la burocracia de la CGT y la CTA.
La Unión Industrial, por su parte, continúa reuniéndose con los principales candidatos presidenciales. Durante el mes de junio, se encontraron con Duhalde y Binner. Sin embargo, mas de allá que buscan relacionarse e influir directamente en todos los candidatos, los industriales parecen mayoritariamente apoyar al kirchnerismo que continúa impulsando sus negocios, al tiempo que les otorga un importante protagonismo. Por ejemplo, varios de los empresarios más afines al gobierno como Bulgheroni (Pan Amarican Energy), Pagani (Arcor), Eskenazi (YPF), Brito (Banco Macro), Rattazzi (Fiat) y De Mendiguren (presidente la UIA, empresario textil) viajaron a Brasil con Cristina Fernández para cerrar negocios con sus pares brasileros y para buscar destrabar los conflictos comerciales entre ambos países.
Así andan los capitalistas argentinos por estos días de campaña: marcando la agenda de los principales candidatos, con la mira puesta únicamente en la expansión de sus negocios y sus millones.